La pérdida de cabello, conocida médicamente como alopecia, es una de las consultas dermatológicas más frecuentes, y afecta a millones de personas a nivel mundial, generando preocupación no solo estética, sino también emocional. Sin embargo, el fenómeno de la caída no siempre es sinónimo de enfermedad; es una parte integral y necesaria del ciclo de vida del cabello, y es por ello, que en esta oportunidad se explica cómo diferenciar la caída normal de una condición patológica, y reconocer cuándo el proceso de renovación capilar está desregulado.
El ciclo de vida del cabello
El cabello, como muchos otros componentes de nuestro cuerpo, sigue un ciclo constante de crecimiento y reposo. En el caso del cabello, este ciclo se compone principalmente de tres fases.
- Fase anágena – Crecimiento. Es la etapa más larga, que dura de 2 a 7 años. En un momento dado, entre el 85% y el 90% de nuestro cabello se encuentra en esta fase, creciendo de forma activa.
- Fase catágena – Transición. Dura solo algunas semanas. En esta etapa, el crecimiento se detiene y el folículo se prepara para el reposo.
- Fase telógena – Reposo y caída. Esta etapa tiene una duración estimada de 3 meses. El cabello descansa y finalmente se desprende para dar lugar al crecimiento de un nuevo pelo en el mismo folículo.
El umbral de la normalidad en la caída del cabello
Debido a que siempre hay una porción de cabello en fase telógena, es completamente normal perder una cantidad diaria de pelo. Los expertos estiman que la pérdida normal diaria se sitúa entre 50 y 100 cabellos.
Esta caída es usualmente difusa y pasa desapercibida, notándose más al cepillarse o al lavar el cabello. Mientras el folículo esté sano y se mantenga el equilibrio, el pelo que se cayó del cuero cabelludo, es reemplazado inmediatamente por uno nuevo.
¿Cuándo la caída deja de ser normal? La alopecia patológica
La caída se vuelve patológica, o se clasifica como alopecia, cuando la pérdida excede significativamente el umbral normal o cuando el cabello nuevo no logra reemplazar al caído, lo que conduce a una disminución visible de la densidad capilar, y se puede presentar alguno de los siguientes casos.
Efluvio telógeno: La caída exagerada
El efluvio telógeno es el tipo de caída anormal más frecuente después de la alopecia androgenética. Ocurre cuando un evento estresante o sistémico provoca que un gran número de cabellos, se estima que más del 30%, entre prematuramente en la fase telógena, resultando en una caída masiva y difusa.
- Pérdida crítica. La caída supera los 150 a 200 cabellos diarios.
- Causas comunes. Es desencadenada típicamente entre 2 y 4 meses después de eventos similares a los que siguientes:
- Estrés emocional o físico intenso.
- Parto (efluvio postparto).
- Infecciones o enfermedades agudas.
- Dietas drásticas o deficiencias nutricionales.
- Problemas tiroideos (hipotiroidismo o hipertiroidismo).
- Uso o suspensión de ciertos medicamentos (anticonceptivos, antidepresivos).
Alopecia androgenética (Calvicie común)
Es la forma más común de pérdida de cabello y, de acuerdo con los expertos en el tema, esto se debe a una predisposición genética. En este caso, la caída no es masiva, sino una miniaturización progresiva del folículo piloso, haciendo que el cabello se vuelva más fino, corto y de menor densidad con el tiempo.
- Patrón en hombres. Retroceso de la línea de implantación frontal y pérdida en la coronilla (vértex).
- Patrón en mujeres. Adelgazamiento difuso, con un ensanchamiento de la raya central.
Alopecia areata – Caída en parches
Es una enfermedad autoinmune que provoca la pérdida de cabello en parches redondos u ovalados bien definidos, que a veces pueden extenderse a todo el cuero cabelludo, desarrollando lo que se conoce como alopecia total o al cuerpo, que se denomina, alopecia universal. Puede estar acompañada de picazón o dolor previo a la caída.
Alopecia cicatricial
Es la forma más grave, donde la inflamación destruye irreversiblemente el folículo piloso, siendo reemplazado por tejido cicatricial. En estas zonas, el cabello nunca volverá a crecer. Puede presentarse con síntomas como dolor, ardor, enrojecimiento o descamación en el cuero cabelludo.
¿Cuándo es momento de consultar al médico?
Dado que la caída del cabello puede ser un síntoma de una condición médica subyacente, la consulta temprana con un dermatólogo es ideal, para un diagnóstico y tratamiento oportunos. Se debe buscar atención médica si se presenta alguno de los siguientes signos de alarma:
- Caída excesiva persistente. La pérdida diaria supera consistentemente los 150-200 cabellos, o si la caída súbita dura más de 3-6 meses.
- Pérdida en parches. Aparición de calvas circulares o irregulares en el cuero cabelludo, cejas o barba.
- Pérdida con síntomas. La caída del cabello se acompaña de dolor, ardor, picazón intensa, enrojecimiento, descamación, o pústulas en el cuero cabelludo.
- Cambio de patrón. Observar un adelgazamiento gradual y progresivo (miniaturización) en el patrón masculino o un ensanchamiento de la raya en el patrón femenino.
- Síntomas sistémicos. La caída del cabello coexiste con otros síntomas como fatiga, aumento o pérdida de peso inexplicable, intolerancia al frío, debilidad muscular o irregularidades menstruales.
- Cabello quebradizo. El cabello se rompe fácilmente y no crece a la longitud habitual, lo que podría indicar deficiencias nutricionales o daño químico.
La importancia de la evaluación médica
En la consulta con el dermatólogo, el médico realizará una historia clínica detallada, haciendo preguntas acerca de la duración de la caída de cabello, hábitos de cuidado, dieta, medicamentos recientes, enfermedades pasadas, cirugías mayores y antecedentes familiares.
El dermatólogo puede emplear herramientas diagnósticas como la dermatoscopia, que funciona para examinar el folículo y el cuero cabelludo, y si es necesario, solicitará análisis de sangre para evaluar niveles hormonales, de hierro, zinc y función tiroidea.
En casos complejos, puede realizar una biopsia del cuero cabelludo para confirmar el tipo de alopecia que puede presentar el paciente.
La caída del cabello es un problema tratable. La clave está en no esperar a que la pérdida sea irreversible. Identificar si la caída es un ciclo natural o una señal de una condición subyacente es el primer paso hacia la recuperación y la salud capilar.
Fuentes:
- Efluvio Telógeno. Disponible en: https://asocolderma.org.co/enfermedades-de-la-piel/efluvio-telogeno#:~:text=Cuando%20el%20porcentaje%20de%20pelo%20que%20se%20encuentra,en%20la%20mayor%C3%ADa%20de%20los%20casos%20es%20transitorio.
- Instituto Médico Ricart. Fases del cabello: ¿Cuáles son sus ciclos de crecimiento? Disponible en: https://institutomedicoricart.com/blog/fases-del-cabello/
- Manual MSD Versión para profesionales. Disponible en: https://www.msdmanuals.com/es/professional/trastornos-dermatol%C3%B3gicos/trastornos-del-cabello/alopecia
- Mayo Clinic. Caída del cabello – Síntomas y causas. Disponible en: https://www.mayoclinic.org/es/diseases-conditions/hair-loss/symptoms-causes/syc-20372926