La cirugía dermatológica es una rama especializada de la dermatología que se enfoca en el tratamiento quirúrgico de diversas afecciones de la piel, el cabello y las uñas. Abarca desde procedimientos mínimamente invasivos para eliminar lunares sospechosos hasta cirugías más complejas para tratar el cáncer de piel. Si alguna vez te has preguntado sobre este campo o te han recomendado un procedimiento dermatológico, aquí conocerás cinco cosas fundamentales que debes saber sobre esta práctica.
1. Más allá de la estética: Tratamiento médico y funcional
A menudo, cuando se piensa en dermatología, la mente evoca tratamientos cosméticos como rellenos o toxina botulínica. Si bien la dermatología estética es una parte importante de la especialidad, la cirugía dermatológica tiene un alcance mucho más amplio y se centra principalmente en el tratamiento médico y funcional de diversas afecciones cutáneas.
- Eliminación de lesiones premalignas y malignas. Hace referencia a la extirpación de lesiones cutáneas sospechosas o confirmadas como cáncer de piel. La detección temprana y la extirpación quirúrgica completa son cruciales para un pronóstico favorable en estos casos.
- Tratamiento de afecciones benignas. Permite el tratamiento de una variedad de afecciones benignas que pueden causar molestias, dolor o problemas estéticos significativos. Esto incluye la eliminación de lunares, quistes, lipomas, verrugas persistentes, fibromas y otras lesiones cutáneas.
- Cirugía micrográfica de Mohs. Esta técnica especializada es particularmente efectiva para tratar ciertos tipos de cáncer de piel de alto riesgo o localizados en áreas cosméticamente sensibles, como la cara, el cuello, las manos y los pies. Es una técnica que asegura la máxima conservación de tejido sano y altas tasas de curación.
- Tratamiento de problemas de uñas y cabello. Los cirujanos dermatólogos también pueden realizar procedimientos para tratar afecciones de las uñas, como uñas encarnadas o tumores ungueales, y del cuero cabelludo, como biopsias para diagnosticar la causa de la pérdida de cabello o la extirpación de tumores.
2. Diversidad de técnicas y procedimientos adaptados a cada necesidad
La cirugía dermatológica abarca una amplia gama de técnicas y procedimientos. El tipo de cirugía recomendada dependerá de varios factores, incluyendo el tipo, tamaño y ubicación de la lesión, la salud general del paciente y los objetivos del tratamiento.
- Escisión quirúrgica simple. Suele ser aplicado para eliminar lunares, quistes pequeños, carcinomas basocelulares y espinocelulares en áreas no críticas.
- Curetaje y electrodesecación. Se emplea para tratar lesiones superficiales como queratosis seborreicas, algunos carcinomas basocelulares pequeños y verrugas.
- Criocirugía. Consiste en congelar la lesión con nitrógeno líquido. Se utiliza para tratar verrugas, queratosis actínicas (lesiones precancerosas) y algunos carcinomas basocelulares superficiales.
- Cirugía láser. Permite tratar una variedad de afecciones, desde la eliminación de vasos sanguíneos dilatados y manchas de la piel hasta la resección de tumores superficiales. La precisión del láser minimiza el daño al tejido circundante.
- Terapia fotodinámica (TFD). Combina un medicamento fotosensibilizante con una fuente de luz para destruir células anormales. Se utiliza principalmente para tratar queratosis actínicas y algunos carcinomas basocelulares superficiales.
- Injertos y colgajos cutáneos. Se aplica en aquellos casos donde ocurre una extirpación de una lesión, y deja un defecto grande, entonces, se utilizan injertos de piel, tomada de otra parte del cuerpo o colgajos cutáneos, para lograr un mejor resultado funcional y estético.
3. La importancia de elegir un Dermatólogo Cirujano Certificado y con experiencia
La piel es un órgano complejo y visible, por lo que la elección del profesional adecuado para cualquier procedimiento quirúrgico dermatológico es fundamental.
- Formación Especializada. Los dermatólogos cirujanos cuentan con una formación exhaustiva en cirugía dermatológica. Algunos incluso se especializan aún más en áreas como la cirugía de Mohs o la cirugía estética.
- Conocimiento integral de la piel. Un dermatólogo cirujano posee un conocimiento profundo de las enfermedades de la piel, lo que le permite diagnosticar con precisión las lesiones y determinar el mejor enfoque quirúrgico.
- Habilidad técnica y precisión. La cirugía dermatológica requiere habilidad manual, precisión y atención al detalle para lograr la extirpación completa de la lesión con la mínima cicatrización posible.
- Manejo de complicaciones. Un dermatólogo cirujano certificado está capacitado para reconocer y manejar cualquier problema que pueda surgir durante o después de la cirugía.
- Consideraciones estéticas. Los dermatólogos cirujanos entienden la importancia de los resultados cosméticos, especialmente en áreas visibles como la cara. Utilizan técnicas de cierre de heridas y planificación quirúrgica cuidadosas para minimizar la cicatrización.
Al buscar un cirujano dermatológico, asegúrate de verificar sus credenciales, su certificación por las sociedades médicas correspondientes y su experiencia en el tipo específico de procedimiento que necesitas. No dudes en pedir referencias o ver fotografías de antes y después de pacientes anteriores.
4. Qué esperar antes, durante y después de la cirugía
Estar bien informado sobre el proceso quirúrgico puede ayudar a reducir la ansiedad y a prepararte adecuadamente para la cirugía dermatológica.
Antes de la Cirugía
- Consulta Inicial. Una consulta detallada con el cirujano para discutir tu historial médico, la afección a tratar, las opciones quirúrgicas, los riesgos y beneficios, y las expectativas de resultados.
- Examen Físico. El cirujano examinará la lesión y la piel circundante.
- Instrucciones preoperatorias. Instrucciones específicas sobre cómo prepararte para la cirugía, como evitar ciertos medicamentos o suplementos, y si es necesario ayunar.
- Consentimiento informado. Se te pedirá que firmes un formulario de consentimiento informado después de comprender completamente el procedimiento, riesgos y alternativas.
Durante la Cirugía
- Anestesia. La mayoría de las cirugías dermatológicas se realizan con anestesia local, que adormece solo el área a tratar.
- Procedimiento. El cirujano realizará la técnica quirúrgica planificada. Esto puede implicar cortar, raspar, congelar o usar láser.
- Cierre de la herida. La herida se cerrará con suturas, adhesivo quirúrgico o se dejará cicatrizar por segunda intención.
Después de la Cirugía
- Instrucciones Postoperatorias. Instrucciones detalladas sobre cómo cuidar la herida y qué signos de infección debes vigilar.
- Manejo del dolor. Pueden recomendar analgésicos de venta libre para aliviar cualquier molestia.
- Restricciones de actividad. Es posible que debas evitar ciertas actividades físicas.
- Cita de seguimiento. Se programará una cita para retirar las suturas y evaluar la cicatrización.
- Resultados. El tiempo necesario para ver los resultados finales variará según el tipo de cirugía.
Es fundamental seguir cuidadosamente las instrucciones postoperatorias para minimizar el riesgo de complicaciones y optimizar la cicatrización.
5. Posibles riesgos y complicaciones
Como con cualquier procedimiento quirúrgico, la cirugía dermatológica conlleva algunos riesgos y posibles complicaciones, aunque generalmente son raros y menores en manos expertas. Es importante estar al tanto de ellos.
- Sangrado.
- Infección.
- Cicatrización.
- Reacción alérgica a la anestesia.
- Daño a nervios o vasos sanguíneos.
- Recurrencia de la lesión.
- Resultados cosméticos insatisfactorios.
La mejor manera de minimizar los riesgos y complicaciones es elegir un dermatólogo cirujano certificado y con experiencia, seguir cuidadosamente todas las instrucciones pre y postoperatorias, y comunicar cualquier inquietud o signo de complicación a tu médico de inmediato.